MI NIÑA.
(A
Sara)
Quisiera pintar tu sonrisa, niña,
de un color que tu belleza no reste,
tus ojos de un hermoso azul celeste.
De tu boquita, dulce como piña,
cada día, tu madre se encariña,
espera que con tu voz la conteste,
cuando a dormir, en la cuna te acueste
y entre sus brazos con amor te ciña.
Desde que te despiertas, tu alegría
se desborda, inundando nuestra casa.
Tus rizos de oro iluminan el día
que tras de tus pasos corriendo pasa.
Para tu madre eres su compañía,
tu amor más que su corazón traspasa.
muy bonito, Antonio. Mi nieta, de 6 años, se llama también Sara, y ... tal cual a tu niña.
ResponderEliminar